Como buen Newyorker que soy, me interesa tanto el Nueva York de hoy, como el de años atrás cuando salir por la noche por las calles de Manhattan era muy peligroso.
Si hay algún testimonio gráfico que refleja el Manhattan de esos años, es gracias a las fotos de Weegee. El período pico de Weegee como fotógrafo freelance callejero y de crímenes fue un torbellino en movimiento continuo que abarcó desde mediados de los '30 hasta los años de la posguerra. Tomó miles de fotografías que definieron a Manhattan como una escena nocturna de film noir con maleantes y gángsteres, vagos y conventilleros, víctimas de riñas domésticas de trasnoche, incendios y choques de autos. Él le dio a a Nueva York un apodo que aún hoy perdura, la Ciudad Desnuda. Sus fotografías representan el espíritu callejero neoyorquino de los años 30 y 40.
El mismo se creó su personaje de reportero de crímenes y se encargó de alimentar su propia leyenda autodenominándose “ Weegee el famoso” y “El fotógrafo más Grande del Mundo”
Weegee afirmaba que sentía picazón en el codo cuando las noticias estaban a punto de ocurrir. Sus premoniciones eran ayudadas por las radios con la frecuencia de la policía y de los bomberos que tenía instaladas cerca de su cama.
En su coche, tenia instalado todo un laboratorio que le permitía acelerar el proceso de revelado de las fotos, para llevarlas lo antes posible a los periódicos. Fue el primer fotógrafo que tenía instalada una radio de policía en su coche, la cual cosa le permitía llegar incluso antes que la policía para captar las situación.
Manhattan cambió mucho desde los tiempos de Weegee. Actualmente, la Ciudad desnuda está probablemente mejor preservada en los archivos del Centro Internacional de Fotografía, que alberga unas 20.000 fotografías de Weegee, junto con cientos de sus negativos, los diarios y revistas donde su trabajo apareció originalmente, y dos de sus sombreros.
Estas son algunas de sus fotos.
Manhattan succes:
Society: